Porque la sociedad en general no tiene ninguna necesidad de que la eduquen y, mucho menos, de que intenten conducir su opinión. Las relaciones públicas se deben limitar a aportar información veraz que permita a las personas tomar sus propias decisiones. De esta manera, las relaciones públicas son idóneas para sensibilizar a la sociedad, dar a conocer alternativas, explicar paradigmas, analizar pros y contras, aportar nuevos datos, clarificar rumores, transmitir confianza hacia lo inusual o novedoso, … y no para crear confusión. VOLVER →